En el marco del Día Mundial de la Salud Mental, el diagnóstico adecuado de los trastornos mentales resulta crítico para brindar un tratamiento efectivo y oportuno. El diagnóstico, establecido a través del DSM y la CIE, proporciona un marco común para que los profesionales de la salud mental identifiquen síntomas y establezcan intervenciones terapéuticas. Sin embargo, persisten desafíos, como la falta de biomarcadores confiables y la comorbilidad de diagnósticos. Nuevos enfoques, como el Research Domain Criteria (RDoC), buscan trascender los límites actuales para integrar avances en neurociencia, promoviendo un enfoque más preciso y dimensional del diagnóstico.

Compartimos en esta ocasión un texto alusivo publicado en Farmacia y Bioquímica en foco por el doctor Rodrigo S. Fernández, investigador CIC – CONICET en el Instituto de Fisiología, Biología Molecular y Neurociencias (IFIByNE)-CONICET, Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, Universidad de Buenos Aires.

SALUD MENTAL. LO NUEVO Y LO VIEJO: ACERCA DE CÓMO CLASIFICAR UNA COLECCIÓN DE SÍNTOMAS [+]

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